GALLETAS PERFECTAS SIN HUEVO Y BAJAS EN MANTEQUILLA

Cada vez que le hago galletas a mi amiga experimento recetas nuevas de galletas sin huevo, ya que su niña es alérgica

Esta vez me pidió unas galletitas para la boda de su tía, así que quise hacer una nueva receta más baja en mantequilla y sin huevo 

Quería comprobar si salían casi tan ricas como las que hago normalmente y la verdad es que no tienen nada que envidiar a mi última receta de las galletas de mantequilla baja en grasa que hago

Tened en cuenta de que estas galletas no quedan tan blanditas como las de mantequilla que podáis hacer habitualmente, pero para mi gusto están mejor, y sobre todo lo más importante es que están muy buenas de sabor, no tienen tanta grasa, no tienen huevo que para los alérgicos viene de miedo y quedan lisas y perfectas para decorar

La receta es muy  parecida a las de mantequilla baja en grasas pero con algún cambio

INGREDIENTES

125 g de mantequilla sin sal (temperatura ambiente)

100 g de azúcar glas

400 g de harina de trigo

60 g de azúcar invertida ( se puede sustituir por sirope de arce -miel de maple )

60 g de miel 

25 g de leche líquida

1/2  cucharadita de esencia o aroma de vainilla

una cucharadita de aroma de mantequilla

En el vaso de la amasadora ponemos la mantequilla y el azúcar, batimos hasta que se integre. Añadimos las mieles ,la leche y las esencias y batimos hasta que esté bien mezclado a velocidad media.

Incorporamos la harina de golpe y batimos con las palas hasta que se mezcle a velocidad media/lenta hasta que se despegue del cuenco, para no incorporar mucho aire,así conseguiremos galletas bien lisas

Sacamos del vaso, amasamos un poco con las manos y dividimos en dos, alisamos entre dos papeles de horno y a enfriar

Se pueden decorar el mismo día una vez que se enfríen, ya que al tener tan poca mantequilla no amarillará la glasa 

en esta ocasión las galletas que decoré fueron unas sencillas galletas de boda con fondant texturizado y con sus nombres impresos. Para terminar las pinté con polvos dorados secos, comestibles desde luego, y listas